En siglos pasados (del XVII al XIX), la fiebre amarilla fue transportada a América del Norte y Europa, causando grandes brotes que interrumpieron economías, desarrollo y, en algunos casos, diezmaron poblaciones. Desde 1970, la fiebre amarilla ha resurgido como una amenaza para la salud pública en las Américas.
La historia natural de la tosferina comienza con la exposición a la bacteria Bordetella pertussis, seguida de un período de incubación de aproximadamente una semana. Luego, la enfermedad progresa a través de tres etapas: catarral, paroxística y de convalecencia. La tosferina es una enfermedad altamente contagiosa, con un período de contagio más largo durante las primeras semanas de la enfermedad.
Los estudiantes de la carrera de medicina en acompañamiento de sus docentes realizan charlas en la comunidad universitaria.
